Los comienzos
También en este terreno comenzaron los primeros ensayos de arquitectura no convencional, utilizando el barro como materia prima para la construcción de viviendas „tipo iglú”, que fueron destinadas para albergue de alumnos durante el tiempo de clases, ya que estos venían del interior de la provincia.
A medida que iba pasando el tiempo se fue ampliando el predio de la fundación, gracias a la ayuda de amigos alemanes, se compró un campo lindante de más hectáreas.
Una de las casas redondas, en su momento fue destinada a ser un jardin de infantes para que una maestra jardinera de Tübingen (Alemania) colabore por un año.
Otra vivienda de un ex-colaborador también fue usada como habitación de alumnos „albergue C”, de esta forma se pudo recibir más alumnos.
En el año 1991/1992 se inició la construcción del jardín de infantes oficial de la F.C.C.F., en forma de 8 esquinas y con arquitectura de barro pisado. Los planes para dicha estructura fueron realizados por dos practicantes de „Arquitectura para el Extranjero” de la Universidad de Arquitectura en Hildesheim (Alemania).
La instalación de biogas se hizo también en ese tiempo por iniciativa de un joven voluntario „zivi” con la ayuda de la Juventud Democrática Cristiana alemana y la parroquia católica de Herrenberg (Alemania).

En el año 2009 la fundación celebró su jubileo de 25 años.